El Departamento de Vida Silvestre de Sri Lanka dijo hoy que hasta septiembre de este año, 293 elefantes y 96 personas habían muerto en el prolongado conflicto entre elefantes y humanos en el país.
El director general del Departamento de Conservación de la Vida Silvestre, M. Sooriyabandara, dijo a Xinhua que el Departamento de Vida Silvestre en colaboración con el gobierno está tratando de minimizar el conflicto humanos-elefantes estableciendo cercas alrededor de hábitats de los elefantes para prevenir que entren en el hábitat humano.
El funcionario indicó que varias medidas más se están llevando a cabo para minimizar el número de muertes que este año ha llegado a un número muy elevado.
"Se adoptará acción legal estricta cuando cualquiera sea atrapado al entrar al hábitat de los elefantes con el objetivo de dañarlos. Los funcionarios del departamento están vigilando continuamente la situación", indicó Sooriyabandara.
Matar a elefantes silvestres en Sri Lanka es un delito castigado con la muerte, sin embargo, ha habido reportes regulares de aldeanos enojados que los envenenan o les disparan.
La semana pasada, siete elefantes fueron hallados muertos en la Reserva Forestal de Habarana, en un supuesto caso de envenenamiento, dijo el departamento, lo que provocó que el gobierno iniciara una amplia investigación.
Los elefantes muertos incluyeron a una elefanta preñada.
Sooriyabandara dijo que se están realizando más investigaciones para precisar la causa exacta de las muertes.
Los registros oficiales muestran que la población de elefantes silvestres en Sri Lanka está calculada en 7.500.