El exvicepresidente de la compañía brasileña Odebrecht, Henrique Valladares, uno de los principales delatores de la Operación Lava Jato, fue encontrado muerto el martes en su casa de Río de Janeiro, confirmaron a Sputnik fuentes policiales.
"Según la comisaría número 14 de Leblon el cuerpo se llevó al Instituto Médico Legal, donde se le hizo una necropsia y se comprobó muerte (por causa) indeterminada, autorizando a los familiares a que retiraran el cuerpo", dijo a Sputnik una fuente de la Policía Civil de Río de Janeiro.
El ejecutivo había acusado de corrupción al excandidato presidencial Aécio Neves (del conservador Partido de la Social Democracia Brasileña) y a Edison Lobo (del Movimiento Democrático de Brasil), que fue ministro de Minas y Energía del Gobierno de Dilma Rousseff (2003-2011), entre otros políticos.
Valladares había declarado a investigadores de la Operación Lava Jato que los pagos que hizo a Neves llegaron a 50 millones de reales (12,2 millones de dólares) y fueron depositados en cuentas bancarias en el extranjero.
El exministro de Rousseff, según Valladares, le pedía sobornos incluso durante una temporada en la que estuvo ingresado en un hospital de Río de Janeiro, en 2012.
Ese dinero tenía relación con la construcción de la represa hidroeléctrica de Belo Monte (en el norteño estado de Pará), y el dinero de Odebrecht tenía como fin acallar las protestas locales contra esa obra, por lo que sus destinatarios iban desde líderes indígenas hasta sindicalistas, según Valladares.