Una de las preguntas que siempre se hace la humanidad es si existe el cielo y el infierno. El temor por llegar al infierno después de morir o arribar al paraíso para vivir por toda la eternidad en el lugar bueno son temas que causan ansiedad entre todo ser vivo.
Pero qué pasaría si te dijéramos que para llegar al paraíso necesitas cierta cantidad de puntos que debes ir acumulando con buenas acciones durante tu vida. Es entonces cuando llega la siguiente pregunta.
¿Cuántos puntos tienes para llegar al lugar bueno?
Ese es el argumento que nos plantea la exitosa serie de Netflix “The Good Place”, protagonizada por la conflictiva y egoísta Eleanor, el indeciso y extremadamente “correcto” Chidi, la superficial y acomplejada Tahani y el delincuente más tonto del mundo Jason.
Tras morir, Eleanor, Chidi, Tahani y Jason son enviados a “The Good Place”, un supuesto pueblo del paraíso que fue diseñado por Michael, con ayuda de la robot -que no es robot- Janet. Lo que los protagonistas no saben es que en realidad no están en el lugar bueno.
Y es que “The Good Place” es en realidad un experimento para las almas “malas” y Michael es en realidad un demonio despiadado que se esconde en un disfraz de hombre amable.
Con lo que no cuenta Michael es que Eleanor, en medio de su egoísmo, es muy perspicaz, lo que provocará una serie de enredos y situaciones que ponen en riesgo este experimento infernal.
Con tres temporadas completas, esta serie genera en el espectador las mismas dudas que tienen los protagonistas al estar en “The Good Place”, haciéndonos pensar si en verdad nuestras acciones en el mundo terrenal nos están dando un lugar en el paraíso.
Y es que si en verdad se lleva un sistema de puntos para lograr llegar al lugar bueno, gran parte de la humanidad estaría en riesgo de ir al lugar malo, pues hasta ser grosero, mentiroso o incluso tirar basura te resta unidades.
Entonces, además de invitarte a maratonear con “The Good Place”, te invitamos a reflexionar si tienes los puntos necesarios para llegar al lugar bueno.