
A unos cuantos días de haberse reformado la Ley para la Protección del Ambiente Natural y el Desarrollo Sustentable del Estado de Puebla, que prohíbe la publicidad sexista, todavía en Puebla abundan ejemplos de estereotipos o explotación de mujeres a través de anuncios que denigran y cosifican al género femenino.
La nueva disposición aprobada en el Congreso del Estado, que va acorde con la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, establece que toda mujer debe tener acceso a una vida libre de ataques y por ello estas no deben vivir en ambientes discriminatorios o de estereotipos que consideren a la mujer como objetos o productos.
Claro ejemplo de lo que no debe caber en publicidad sexista es el anuncio de la ferretería “El Talismán”, que presume, en el cruce de Avenida Reforma y la Diagonal Defensores de la República, un anuncio de sus sucursales con una mujer en ropa interior, lo cual no tiene nada que ver con el giro de esta empresa.
Otro ejemplo en el que la explotación no es de carácter sexual, sino de estereotipos, es la que propone la jarciería “La Potosina” en pleno corazón del centro histórico y a un lado de la Tesorería Municipal. En Avenida Reforma 134, planta baja, miles de peatones y automovilistas pasan a diario junto a la foto de una mujer enfundada en ropa de limpieza como guantes, esponjas y un overol, algo que cae en estereotipos y cosificación.
Lo mismo ocurre a lo largo de la ciudad con los centenares de publicidades móviles que promueven a mujeres en poca ropa como parte de espectáculos para adultos, como pasa con la intensa campaña del club nocturno “40 Grados”, que anuncia a sus bailarinas en condiciones netamente sexuales.
La nueva reforma va de la mano con un manual que considerará como sexistas los anuncios que ridiculicen, exhiban o invisibilicen a mujeres, lo mismo que refuerce condiciones de género, excluya, sexualice o denigre, pues ello abona al refuerzo de estereotipos que afectan a mujeres y aúnan a la violencia de género.