Tanto Alberto Jiménez Merino del PRI como Enrique Cárdenas Sánchez del PAN comenzaron ya con una campaña de promoción del llamado "voto útil" con el que pretenden ganar más adeptos y más votos de cara a la elección del próximo 2 de junio, asegurando que con la suma de los indecisos y los de su contrincante, pueden alcanzar o superar a Miguel Barbosa Huerta, candidato de Morena y puntero en las encuestas.
Sin embargo, este planteamiento dista de la realidad de acuerdo a las últimas mediciones en estudios demoscópicos, ya que entre la suma de indecisos y los porcentajes de intención de voto, tanto del PRI como del PAN, no son suficientes para superar al rival morenista.
Esto sin tomar en cuenta que la mayoría de las personas que aún no deciden por quién ejercer su sufragio, mantendrán así su decisión hasta el final, con una amplia posibilidad que sean parte del grupo que se abstenga de votar el primer domingo de junio más otro porcentaje que terminará por anular la boleta electoral.
De tomar en cuenta la encuesta más reciente publicada a través de medios de comunicación sobre la contienda por la gubernatura, la de Más Data, son 21.8 por ciento los que siguen indecisos y, de ser el caso de voto inteligente en favor de Enrique Cárdenas, se sumaría el 7.1 por ciento que mantiene Alberto Jiménez Merino del PRI, suman 28.9 puntos porcentuales, es decir 9.2puntos todavía debajo de Miguel Barbosa Huerta.
Por otro lado, en la encuesta de Reforma, 32 por ciento de intención de voto es hacia Cárdenas, sin tomar en cuenta un 19 por ciento de indecisos, pues de ser así, su nivel de aceptación baja y más ese 19, apenas llegaría al 40 por ciento por debajo del 52 por ciento de intención de voto que tiene Miguel Barbosa Huerta.
La idea del voto útil se ha evocado para que los segundos lugares tengan una mejor proyección en la elección y que quienes son punteros no sean los ganadores; sin embargo, no ha habido caso en México dónde el llamado a esta medida electoral haya sido exitosa.
De hecho, pese a una enorme campaña que hizo en su momento Ricardo Anaya Cortés, excandidato a la Presidencia en 2018, se calcula que el porcentaje de voto útil apenas le entregó un 1 por ciento, que fue mínimo ante la diferencia de 20 puntos que tuvo el ahora presidente, Andrés Manuel López Obrador.