Aunque parezca increíble, es posible perder peso sin ir al gimnasio todos los días. La fórmula infalible para adelgazar consiste en mejorar la alimentación y moverse más; para lograrlo solo es necesario algo tan sencillo como caminar.
Además de ser un hábito saludable que contribuye a que las personas se sientan bien, ayuda a evitar el sobrepeso, pero de una forma menos costosa.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, para estar saludable las personas tienen que dar 10 000 pasos al día. Con ese movimiento (serán unos ocho kilómetros más o menos cada 24 horas) pueden prevenirse enfermedades como la obesidad.
Sin embargo, si se hace un esfuerzo un poco mayor, solo de 5 000 pasos más, pueden perder peso o adelgazar.
Una persona camina alrededor de 2 000 pasos en un kilómetro y medio, quemando unas 100 calorías, pero para perder un kilo por semana se necesita quemar unas 1 000 calorías al día, lo que equivaldría a caminar 7.5 kilómetros aproximadamente.
No obstante, los beneficios de caminar rápido para el organismo son más, pues mejora la respuesta muscular, aumenta el consumo de calorías, facilita el control del peso, activa la circulación cardiaca, disminuye los niveles de colesterol y de glucosa, contribuye al control de la presión arterial y mejora las funciones respiratoria, intestinal y sexual.
