La actividad volcánica no implica riesgo… por el momento

La actividad volcánica no implica riesgo… por el momento

Foto: Enfoque

De acuerdo con Protección Civil Municipal,  entre lunes y martes se han registrado 113 exhalaciones de vapor y gas con pequeñas cantidades de ceniza del cráter del Popocatépetl, pero a pesar de ello el semáforo continúa en Amarillo Fase 2, por lo que al momento se sigue monitoreando la constante actividad del coloso.

 

Sin embargo, tanto la dirección de Protección Civil Estatal y Municipal de Puebla, así como el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), prevén que en las próximas horas continúe la actividad explosiva de escala intermedia y caída de ceniza conforme la dirección del viento.

 

Hasta el momento, el último reporte de la actividad solo es la caída de ceniza y sobre ello el titular de Protección Civil, Gustavo Ariza Salvatori, señaló para Imagen Poblana que las condiciones de viento en la capital del estado son favorables para que la nube de ceniza que emana del Popocatépetl no llegue a la capital y se dirija hacia otros puntos de la zona metropolitana; sin embargo, se prevé que para diciembre suceda lo contrario y la Angelópolis sea la afectada.

 

El especialista explicó que cada fin de año el viento no es favorable para la ciudad, por lo que se espera que ante la posible caída de ceniza, aunque esta actividad es normal y está prevista dentro del escenario, no hay riesgo alguno.

 

"Hay que recordar que en esta temporada del año el viento ya es en dirección a Puebla, entonces en diciembre la probabilidad de caída de ceniza es más grande que todo el resto del año; sí hay que tomarlo en cuenta, porque la actividad del volcán Popocatépetl continúa, pero en está ocasión el sentido del viento no está con dirección a la capital" dijo.

 

Ariza Salvatori llamó a los ciudadanos a estar atentos a la información que difundan las autoridades para conocer la evolución del volcán o si hay necesidad de tomar otras medidas.

 

Sobre la caída de ceniza, recordó que no es tóxica y los riesgos para la población en la ciudad de Puebla y en demarcaciones colindantes no pasan de irritación de ojos, garganta, abrasiones en córnea, lagrimeo y hasta conjuntivitis; por ello, lo recomendable es usar cubre bocas, lentes, gorras, camisas de manga larga, no hacer actividades al aire libre, e incluso resguardar a mascotas.

 

En caso de una contingencia mayor como erupción, se ponen en marcha los protocolos de evacuación y participan los tres niveles de gobierno para salvaguardar la integridad de los habitantes que estén más cercanos al coloso; en primera instancia, el CENAPRED verifica el monitoreo volcánico para lanzar la alerta y aviso de evacuación, en caso de ser necesario.

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