Washington.- El secretario de Estado, Mike Pompeo, reveló hoy en el Congreso que el régimen de Kim Jung-un había dejado de responder desde hace varios días a las comunicaciones de la administración estadunidense en preparación para la cumbre Trump-Kim en Singapur.
Pompeo, quien defendió la decisión del presidente Trump de cancelar la cumbre aunque declinó responder si Pyongyang fue notificado por adelantado, sugirió que Corea del Norte no estaba dando seguimiento a los preparativos para el encuentro.
“En los últimos días, nos avocamos a establecer, con el líder Kim y yo, equipos de preparación para comenzar a prepararnos para la cumbre. Y no recibimos ninguna respuesta a nuestras preguntas”, dijo al Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Al inicio de la audiencia, Pompeo leyó en voz alta la carta del presidente Trump dirigida a Kim en la que decidió cancelar la reunión, prevista para el 12 de junio en Singapur, bajo el argumento de que Kim mostró en recientes declaraciones “tremendo odio y hostilidad abierta”.
Kim calificó recientemente al vicepresidente estadunidense Mike Pence como un “tonto político” y abrió la posibilidad de una confrontación nuclear en caso de una cancelación de la cumbre.
Cuestionado en la audiencia sobre si la Casa Blanca notificó por adelantado a Kim sobre la cancelación de la reunión, Pompeo declinó responder. “No quiero hablar sobre a quienes notificamos. La Casa Blanca hablará sobre eso en el momento apropiado”.
Durante la audiencia, el senador demócrata de Massachusetts, Ed Markey acusó a la administración Trump de desperdiciar la oportunidad de lograr un acuerdo de desnuclearización con Corea del Norte.
Markey criticó especialmente las declaraciones del Asesor de Seguridad Nacional John Bolton, quien sugirió que las negociaciones con Corea del Norte sigue el modelo de Libia en 2003, cuando su programa nuclear fue desmantelado completamente por Estados Unidos.
Ocho años después el líder libio Muamar Kadafi fue asesinado por rebeldes que fueron respaldados por países occidentales.
“Deberíamos estar negociando la paz, pero ustedes parecen estar negociando la guerra”, deploró Markey. “Parece que están dispuestos a desperdiciar esta oportunidad defendiendo el modero Kadafi. Perdieron esa oportunidad. Pompeo no respondió al senador.