Al menos 25 personas murieron, incluidos cinco periodistas, y otras 45 resultaron heridas en los dos atentados suicidas registrados este lunes en la capital afgana, Kabul.
Es el ataque más mortífero contra civiles en Kabul desde que comenzase el nuevo año afgano el 21 de marzo.
Según el portavoz de la policía Hashmat Stanikzai, un atacante suicida que conducía una motocicleta hizo detonar los explosivos que llevaba en el área de Shash Darak, lo que causó su propia muerte y la de varias personas más.
Cuando la gente, entre ella varios periodistas, se congregaba en el lugar, otro terrorista disfrazado de periodista activó los explosivos que tenía escondidos en la cámara y dejó una docena más de fallecidos, entre ellos él mismo.
La primera explosión ocurrió a las 08:00 hora local y la segunda alrededor de media hora más tarde, de acuerdo con funcionarios y testigos.
El centro afgano de periodistas confirmó que cinco periodistas, incluido corresponsales, camarógrafo y fotográfos de diferentes agencias de noticias, murieron y otro resultó herido.
El Estado Islámico ha reivindicado las dos explosiones.