El incremento en las demostraciones de poder por parte de Estados Unidos y Corea del Norte ha puesto a los analistas a pensar en una nueva guerra protagonizada por la potencia de Norteamérica, de dimensiones incalculables.
A diferencia de las hostilidades en contra de Siria y el Estado Islámico, que no cuenta con un poderío armamentístico de cantidades similares a las de Estados Unidos, Corea del Norte sí tiene un arsenal que incluye bombas nucleares.
Por ello es que en México han surgido "memes" en los que se le insiste a Kim Jong-un, el dictador de Norcorea, que apunte bien a su objetivo que en este caso es los Estados Unidos, no sea que en una de esas vaya a equivocar la puntería.
Mientras el Estado Islámico ha penetrado lentamente en el tejido social de los países donde ha atacado —principalmente naciones europeas que simbolizan la prosperidad del primer mundo—, la potencia asiática cuenta con armamento súper potente que representaría una verdadera amenaza para la supuesta "nación más poderosa del mundo".