Roma.- Más de mil 100 inmigrantes desembarcaron hoy en los puertos italianos de Augusta (Sicilia), en Salerno y en Lampedusa tras ser rescatados por la Marina Militar en barcazas a la deriva en el Canal de Sicilia, informó la Guardia Costera.
En Augusta fueron rescatadas 446 personas, incluidos mujeres y niños, que llegaron a ese puerto en el barco Bettica de la Marina Militar italiana, que los socorrió en alta mar.
La capitanería del puerto de Augusta informó que los inmigrantes, cuya nacionalidad no fue revelada, fueron sometidos a inspecciones médicas a bordo de la nave que los rescató.
El segundo desembarco se verificó en el puerto de Salerno, en la región meridional de Campania, a donde llegaron 541 somalíes y eritreos, que fueron salvados por la Marina Militar en dos barcazas a la deriva a 150 millas al sur de Lampedusa.
Las fuentes detallaron que el grupo está compuesto por 365 hombres, 174 mujeres y un menor no acompañado, además de un recién nacido.
“Hemos fotografiado e identificado a todos y por ahora no hemos detectado ninguna situación crítica”, declaró el jefe de la policía de Salerno, Alfredo Anzalone.
“Una vez más hemos acogido a estas personas con la máxima atención humana que merecen”, añadió.
Explicó que una parte de los indocumentados se quedará en Salerno y el resto será transferido a centros de acogida de toda Italia.
Otros 114 inmigrantes, originarios de países subsaharianos, desembarcaron en la isla de Lampedusa, tras ser rescatados en el Canal de Sicilia por la nave Fiorillo de la Marina Militar italiana.
El grupo fue llevado al centro de acogida de la zona de Imbriacola, en Lampedusa, donde ya había otras 515 personas, confirmó la Marina Militar.
La Guardia de Finanzas señaló por su parte que una balsa con 115 personas fue socorrida la mañana de este miércoles a 40 millas al norte de Libia por la nave Denaro de ese cuerpo de policía militar.
Indicó que la nave Denaro llegó a la zona en una operación de reforzamiento de la vigilancia contra los traficantes de personas y que se espera que los inmigrantes rescatados lleguen a tierra en las próximas horas.
La oleada de inmigrantes que viaja por mar no se ha frenado pese al naufragio del domingo pasado en el Canal de Sicilia, en el que habrían muerto entre 700 y 900 personas en la peor tragedia en el Mediterráneo desde la Segunda Guerra Mundial.
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, advirtió este miércoles en el Parlamento que el incidente se podría repetir y urgió a Europa a enfrentar la crisis.