Varias "degradaciones" fueron cometidas en el cementerio de la localidad normanda de Tracy-sur-Mer, anunció la noche del martes el ministro francés de Interior, Bernard Cazeneuve, que expresó su "indignación".
"Varias decenas de crucifijos fueron desplazados, algunos plantados al revés en el suelo", afirmó el ministro en un comunicado.
La gendarmería constató por la noche las degradaciones en el cementerio de dicho pueblo de 350 habitantes, situado en el litoral del oeste francés.
Este acto de vandalismo se produce dos días después del descubrimiento de la profanación de varios centenares de tumbas en el cementerio judío de Sarre-Union (Alsacia).
Cinco presuntos profanadores, de 15 a 17 años, oriundos de la región y sin antecedentes judiciales, permanecen detenidos desde entonces y rechazan motivos antisemitas.