De acuerdo a las conclusiones de un grupo de científicos que trabajan con datos del telescopio espacial Planck, que entre 2009 y 2013 tuvo la misión de cartografiar el cosmos, las primeras estrellas que aparecieron en el universo son 140 millones de años más jóvenes de lo que se pensaba.
La Agencia Espacial Europea (ESA) desconectó el Planck en octubre de 2013 para analizar los nuevos hallazgos a partir de sus mediciones, los cuales sitúan el nacimiento de los primeros cuerpos celestes aproximadamente 560 millones de años después del Big Bang y no 420 millones de años como se creía hasta ahora.
Sin embargo, esos 140 millones de años de diferencia deben ser situados en el marco de los 13,800 millones de años de edad del universo.
Esa es la edad establecida por los científicos al estudiar, a través del telescopio, la radiación cósmica de fondo, una suerte de fósil lumínico que surgió a la vez que el cosmos y que continua ofreciendo evidencias científicas a los investigadores.