Un joven soñó que entraba en un supermercado recién inaugurado y, para su sorpresa, descubrió que Jesucristo se encontraba atrás del mostrador.
- ¿Qué vendes aquí? - le preguntó.
- Todo lo que tu corazón desee - respondió Jesucristo.
Sin atreverse a creer lo que estaba oyendo, el joven emocionado se decidió a pedir lo mejor que un ser humano podría desear:
- Quiero tener amor, felicidad, sabiduría, paz de espíritu y ausencia de todo temor - dijo el joven-. Deseo que en el mundo se acaben las guerras, el terrorismo, el narcotráfico, las injusticias sociales, la corrupción y las violaciones a los derechos humanos.
Cuando el joven terminó de hablar, Jesucristo le dice:
- Amigo, creo que no me has entendido. Aquí no vendemos frutos; solamente vendemos semillas.
"Convierte en frutos las semillas que hay en tí".
Notas Relacionadas
Inaugurados los Juegos Nacionales Escolares 2025
18 de junio de 2025
La Ley Silla llegó, pero en Puebla algunos ni se enteraron
18 de junio de 2025
Puebla, foco rojo en abandono de viviendas
18 de junio de 2025
SEDIF brinda atención a infantes y preadolescentes con espectro autista
18 de junio de 2025
Ariadna Ayala invita a celebrar a papá con la carrera “Soy tu fan”
18 de junio de 2025
Avioneta termina volcada tras aterrizaje forzoso en Huejotzingo